miércoles, 1 de julio de 2009

El 30 de junio no sólo expiran muchos de los contratos que ligan a los futbolistas con sus respectivos equipos. También es el momento por parte de los clubs de sacar la calculadora, ver lo que han gastado e ingresado durante la temporada y sacar conclusiones. Ambas cosas, en realidad, están conectadas entre sí. El Barça ha hecho bien los deberes y las cuentas son positivas. Todo ello, sin tener que recurrir a inventos de última hora que permitan cuadrar los números, algo que sí ha sucedido en otras temporadas. Sin ir más lejos, la anterior a la que acaba de acabar.

Sin Pep Guardiola, seguramente, no se habría llegado a los 380 millones de euros que se presupuestaron en su momento. Es cierto que el éxito deportivo le ha costado al club 39 millones de euros en incentivos, pero también es verdad que el triplete y la marcha positiva del primer equipo ha provocado que otras fuentes de ingresos se vieran incrementadas, como la venta de camisetas o las entradas al Camp Nou, por poner sólo dos ejemplos.
Share

Share

twitterfacebookgoogle pluslinkedinrss feedemail